A veces se oye la expresión "... más vale tarde que nunca ...". Sin embargo, creo que es una tontería para suscribirse a la opinión de que el anuncio del Banco Central Europeo (BCE) que se trata de ampliar su programa de compras de bonos va a ser la panacea para la economía de la eurozona.
El Jueves, 22 de enero el presidente del BCE, Mario Draghi, anunció que el programa de compra de activos por valor de EUR60 mil millones (USD67 millones de dólares) al mes de marzo 2015 hasta septiembre 2016 fue simplemente creando el marco en el que el potencial de crecimiento puede ser realizado.
Draghi estaba apuntando al hecho de que el ingrediente clave para el crecimiento económico se expanda es la confianza.
Eso no requiere cada vez más el gasto estatal que bastidores hasta una mayor deuda nacional o una mayor presión fiscal y la regulación. Estos factores tienen un hábito de desplazamiento o ahuyentando a la del sector privado.
Se ha demostrado empíricamente que ningún partido puede perder el capital con mayor eficacia que el Estado soberano. Es demasiado fácil para el Estado se expanda, y sin embargo, demasiados políticos, ya sean locales, nacionales o incluso supranacionales no puede resistirse a juguetear con las palancas económicas y tienen una resistencia a renunciar al control.
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